Taxistas unidos en demanda colectiva exigen a la Ciudad pago pronto por daños tras suspensión de sus licencias

Más de 5,600 conductores de taxis y limusinas de la Gran Manzana, unidos en una demanda colectiva contra la Ciudad, exigieron este lunes a la Administración Municipal que llegue a un acuerdo y los indemnice por los daños que han sufrido ante las suspensiones de sus licencias de manejo, cuando han sido arrestados por denuncias de pasajeros y otras personas, muchas de las cuales eventualmente fueron desestimadas. Se estima que 90% de los casos contra los conductores arrestados no tenían mérito o se redujeron a infracciones menores y 80% de los presuntos delitos ocurrieron fuera de servicio.

Con pancartas donde pidieron “respeto y dignidad” a sus derechos, decenas de trabajadores del volante se dieron cita en Foley Square, en Manhattan, para recordarle a la Ciudad y a la Comisión de Taxis y Limusinas (TLC) que un juez declaró inconstitucional la suspensión de licencias, hecho que en los últimos casi 20 años ha dejado a miles de taxistas sin derecho al trabajo, padeciendo la falta de ingresos.

Los choferes afectados recordaron además que todos aquellos conductores que en su carrera laboral hayan sido víctima de la suspensión de sus licencias tras detenciones de la policía, entre 2003 y 2020, independientemente del estatus del caso penal, tienen hasta el 13 de enero próximo para sumarse a la demanda colectiva para exigir daños monetarios.

Así lo manifestó Bhairavi Desai, presidenta de la organización New York Taxi Workers Alliance (NYTWA), quien explicó que desde el 2003, a unos 20,000 taxistas les han sido suspendidas sus licencias por arrestos, antes de que los conductores fueran condenados o incluso juzgados, y sin siquiera contemplar el historial penal, lo que ve como un acto injusto, donde no prevalece la presunción de inocencia.

La vida de los conductores se puso patas arriba, algunos hasta el punto de la ruina, por perder sus trabajos de la noche a la mañana. Los conductores profesionales de la ciudad de Nueva York son en su mayoría inmigrantes de color, y sus derechos fueron pisoteados”, dijo la activista, quien urgió a la Ciudad que haga un acuerdo en vez de que cada chófer se vaya a audiencias individuales. “Compensar todo ese sufrimiento y que se recupere la pérdida de ingresos, es solo una muestra de lo que la ciudad debe hacer”.

Francisco Guzmán, ha vivido ese drama en carne propia, pues narró que en febrero pasado, sin siquiera estar haciendo labores de taxista, sino usando un vehículo para un trabajo de medio tiempo, fue arrestado por la policía en Brooklyn luego de que una mujer lo denunciara por presuntamente haberla agredido en la calle. Desde entonces le suspendieron su licencia de conducción y el permiso de TLC para manejar taxi, sumiéndose en una crisis por falta de trabajo e ingresos.

“Exigimos que nos traten con respeto. Cómo es posible que antes de que la policía investigue bien las cosas, por cualquier persona que diga que uno la agredió, inmediatamente lo arresten a uno y le quiten no solo la licencia sino la de TLC también. Eso tiene que cambiar”, dijo el mexicano, quien llevaba más de 14 años como taxista y estuvo tres días preso. “Me llevaron a la corte, tuve que endeudarme contratando un abogado y al final se hicieron las averiguaciones, hablaron con testigos y vieron que yo no había hecho nada, pero por meses he estado sin dinero, sin trabajo, debo meses de renta, no tengo nada para Navidad y todavía TLC no me regresa mi licencia. Tienen que indemnizarnos“.

Álvaro Crow, otro de los conductores afectados, quien es parte de la demanda colectiva, acción legal que busca reclamar daños por más de $100 millones de dólares para todos los chóferes, pidió además que se hagan cambios en las suspensiones de licencias a taxistas.

Cuando me suspendieron la licencia no podía pagar mis cuentas y me endeudé mucho. Sentía que no tenía derechos, que no había justicia, porque me presumieron culpable antes de que pudiera probar mi inocencia, a pesar de que no tenía antecedentes penales ni arrestos previos”, dijo el conductor latino. “La TLC me trató como un parásito y fue degradante y deshumanizante”.

Agmed Elsherif, otro de los taxistas que perdió su licencia tras ser arrestado, pidió a la policía y a la TLC que mejoren sus protocolos de acción e investigación, pues aseguró haber sido arrestado, cuando él fue la víctima de una pasajera, hecho que documentó con imágenes.

Dan Ackman, abogado de los conductores, pidió a todos los chóferes que se hayan visto afectados a que se comuniquen con su oficina para pelear por lo que les corresponde y criticó que hayan pasado tantos años sin que se resuelvan las cosas.

“Este caso tomó demasiado tiempo, pero finalmente llegó al lugar correcto. Nuestra esperanza ahora es que la corte encuentre una manera de otorgar daños y perjuicios de manera rápida y justa y a la mayor cantidad de víctimas posible”, dijo el defensor.

El taxista mexicano Francisco Guzmán

Shannon Liss-Riordan, otra de las abogadas de la demanda colectiva, agregó que durante demasiado tiempo, la Ciudad ha estado maltratando a los conductores profesionales y privándolos a ellos y a sus familias de su sustento y es el momento de actuar.

“El tribunal falló a favor de los conductores y es hora de que la Ciudad finalmente reconozca eso, tratarlos con justicia y compensarlos por sus pérdidas”, dijo la abogada.

La Administración del Alcalde Adams pasó el asunto a la Comisión de Taxis y Limusinas, agencia que advirtió que actualmente el manejo de esos casos están de acuerdo a la ley y la Constitución, pero no habló específicamente del clamor de indemnización de los demandantes.

“Los procedimientos han evolucionado desde el inicio de esta demanda hace 17 años, y todos los procesos que tenemos hoy en día son constitucionales”, dijo Jason Kersten, vocero de TLC. “Tomamos en serio los derechos de nuestros conductores y estamos comprometidos con su trato justo. Esta Administración ha ido más allá para brindar apoyo financiero y mejores condiciones de trabajo para los conductores”.

La TLC mencionó además que el Tribunal aún debe finalizar los procedimientos para abordar el resto de este caso y la organización de las audiencias.

El taxista egipcio Agmed Elsherif mostró los daños que sufrió

Datos sobre la larga batalla de los conductores para que los indemnicen

  • 2006, a través de la NYTWA, un grupo de conductores presentaron una demanda sobre la constitucionalidad de las suspensiones de las licencias por parte de TLC al ser arrestados
  • 2019, un tribunal federal de apelaciones consideró inconstitucional la política de suspensión.
  • 2020, un tribunal de distrito federal certificó este caso como una demanda colectiva que incluía a los conductores que fueron suspendidos entre 2003 y 2020.
  • 5,600 condutores se han sumado a la demanda actualmente
  • 20,000 son los conductores que se han visto afectados por esas medidas
  • 90% de los casos contra los conductores arrestados no tenían mérito o se redujeron a infracciones menores
  • 1,300 conductores fueron suspendidos por 1,000 días o más
  • 70% de los cargos de arresto fueron delitos menores
  • 80% de los presuntos delitos ocurrieron fuera de servicio.
  • 13 de enero del 2023 vence el plazo para que más chóferes su sumen a la demanda colectiva
  • Para sumarse a la demanda puede visitar la página web: tlcsuspensioncase.com
  • También puede envíar un correo electrónico a tlcsuspensioncase@llrlaw.com
  • Puede llamr a la firma Lichten & Liss -Riordan, PC al 929-477-9200.
  • También pueden comunicarse con la Alianza de Trabajadores de Taxis de Nueva York al 718-706-9892 o escribir a TLCCase@nytwa.org

Fuente: El Diario