Miembros de una familia dominicana y otros criollos traficaban fentanilo con efigies de Trump, Mickey Mouse, Iron Man y logo de Bitcoin
Varios miembros de una familia dominicana y otros criollos, un total de nueve traficaban millares de pastillas de fentanilo desde el Alto Manhattan, y a los embases de la droga, les pusieron las efigies de Donald Trump. Mickey Mouse, Iron Man y el logo de la moneda Bitcoin, según la acusación de la Fiscalía Especial Anti Narcóticos.
En el expediente figuran los hermanos Edwin y Elvis Cabrera, su hermana Jennifer Durán y su tío Miguel Castillo, miembros de una misma familia.
Los otros imputados, Frankie Rosario, Juan de Jesús, Erick Sánchez, Rubén Burgos y José Rodríguez formaban parte de la banda estaba en el ojo de la DEA en una larga investigación que concluyó con las detenciones y múltiples cargos para los sospechosos.
Rodríguez, es acusado de posesión de un arma fantasma.
La fiscal especial anti narcóticos, Bridget Brennan dijo ayer miércoles en un comunicado que 75,000 píldoras de fentanilo fueron confiscadas a los narcos dominicanos con base en el Alto Manhattan, desde donde distribuían la droga a toda la ciudad y otros estados como Rhode Island y Pensilvania.
La fiscalía dijo que la banda dirigía una extensa red de tráfico de fentanilo, metanfetamina y cocaína que incluía la venta de píldoras con las efigies del ex presidente Donald Trump, Mickey Mouse, y los logos de Bitcoin y Legos.
La policía incautó drogas por valor de $2,5 millones de dólares para desmantelar la operación multi estatal de prensado y venta de psicotrópicos después de una investigación conjunta de dos años, explicó la fiscal Brennan.
Las coloridas pastillas, algunas de ellas falsas de oxicodona mezcladas con fentanilo altamente letal, se convirtieron en casi una docena de formas reconocibles que incluían el emblema de Dominó Pizza, espadas, y siluetas verdes y amarillas de Trump.
La mayor parte de las drogas estaban escondidas en la sala de calderas de un edificio de apartamentos en El Bronx, donde uno de los sospechosos trabajaba como súper intendente, añadieron los fiscales.
“El fentanilo y la metanfetamina están siendo prensados en píldoras por distribuidores locales como los hermanos Cabrera, así como por los cárteles en México”, dijo el agente especial a cargo de la DEA, Frank Tarantino, en un comunicado.
“No hay diferencia entre un molino de píldoras en México y una sala de calderas en El Bronx porque ambos producen la muerte”, agregó.
Rosario, Juan de Jesús, Sánchez y Burgos, fueron acusados de ser parte de la operación que llegó hasta Rhode Island y Pensilvania, dijeron los fiscales. Todos fueron golpeados con cargos de conspiración en segundo grado y posesión de drogas.
Una segunda acusación acusó a otro hombre, José Rodríguez, de posesión de armas.
Los investigadores dijeron que la operación contra la banda comenzó en agosto de 2019 hasta el mes pasado, con los hermanos Cabrera como los objetivos principales de la investigación en la que participaron federales de la DEA, policías locales y estatales.
La pandilla utilizó máquinas de prensar píldoras por correo enviadas al Alto Manhattan y Rhode Island para fabricar las pastillas y usaban un lenguaje codificado} para hacer las transacciones y emitir instrucciones.
La operación incluyó agentes del FBI, la DEA, la Oficina del Fiscal del Distrito de Manhattan y la policía de Nueva York, que allanaron dos apartamentos en el Alto Manhattan y El Bronx cerca del estadio de los Yankees.
Más de 26,000 píldoras con fentanilo y 50,000 de metanfetamina que pesaban más de 40 libras, 2 kilogramos de fentanilo en polvo y 3 de cocaína.
“Las píldoras de fentanilo falsas representan una amenaza oculta para los usuarios que piensan que conocen la potencia de las drogas que están comprando”, señaló la fiscal Brennan. “Los vendedores toman una decisión calculada para sacar provecho de su ingenuidad independientemente de las consecuencias mortales”, subrayó la funcionaria anti drogas.
Por Miguel Cruz Tejada