Cada vez hay más neoyorquinos al borde del abismo financiero: Latinos y madres solteras llevan la peor parte
En la famosa canción “New York New York”, de Frank Sinatra, una de sus líneas más conocidas advierte que ‘el que lo logra en Nueva York, puede lograrlo en cualquier lugar’, y que al final, ‘depende de uno’. Y aunque la fracesita se ha popularizado como un llamado al éxito, en la vida de neoyorquinos como Josefina Villalba, quien lleva 25 años viviendo, o como ella misma dice, mientras frunce el ceño, “sobreviviendo”, no hay nada más alejado de la realidad: ‘la canción es puro cuento, y peor tantito para gente como nosotros’.
Y es que aunque la trabajadora de limpieza asegura que se “parte el lomo como burra“, a veces hasta siete días a la semana, pagar los $2,000 de renta de su apartamento en Corona, Queens, $300 mensuales para comprar los productos de hogar que no incluyen en los mercados que le dan en dos despensas a las que va, $138 de la MetroCard, $150 entre internet, gas y luz, $185 del plan familiar de celulares que tiene con sus dos hijos menores, $70 en tortillas de maíz, $100 en lavandería y ropa, $250 que le manda a su mamá en México, y una cuota de $275 para cubrir una deuda en la que tuvo que meterse en la pandemia para lograr subsistir, le ha quedado imposible.
“Yo me hago entre $2,700 y $3,000 cada mes y mis gastos son como de $3,400, osea que súmele… no me da. La matemática no da, entonces no depende de uno, como dice esa canción, eso es mentira… pinche canción no fue escrita pa’ gente como yo sino pa’ los ricos. A ver hasta cuando podemos seguir batallando”, dice la madre soltera, manteniendo un gesto en el que la risa y la preocupación se funden en un suspiro de resignación.
Y es que en los cinco condados de la Gran Manzana, cada vez más neoyorquinos están más al borde del abismo financiero, como la acaba de revelar la encuesta “Unheard Third Survey”, elaborada por la organización Community Service Society, que confirma datos del reporte de “United Way of New York City”, que advierte que más del 50% de los neoyorquinos, no solo de bajos ingresos sino también de clase media, no cuentan con ingresos para poder cubrir el costo de vida y llegar a fin de mes “victoriosos”.
El nuevo sondeo deja ver que neoyorquinos latinos, negros y madres solteras llevan la peor parte. Y al abordar las que son las grandes limitantes para poder salir adelante y tener una vida mejor, saltan la necesidad de viviendas asequibles y el acceso a la salud, como fichas clave: 45% de los encuestados ven la falta viviendas como una barrera que impide tener tranquilidad financiera, de acuerdo a la encuesta.
El informe destaca que entre neoyorquinos de bajos ingresos inferiores al 200 por ciento del nivel federal de pobreza, 52% de los encuestados se refirieron a la vivienda asequible como su preocupación número 1, y los hallazgos fueron todavía más inquietantes entre madres trabajadoras de bajos ingresos, pues el 62% de ellas señaló la falta de unidades residenciales de bajo costo como su principal barrera para poder salir adelante este 2023. En 2022, la preocupación sobre la vivienda era del 46%.
“La falta de acceso a viviendas asequibles tiene un impacto multifacético en las vidas de los neoyorquinos; obliga que los hogares desvíen una mayor proporción de sus limitados ingresos hacia la vivienda y lejos de actividades productivas e inversiones como la educación superior y la atención de salud, y en muchos casos desafortunados, puede conducir a desalojos traumáticos y ciclos de falta de vivienda”, advierte el informe de la organización Community Service Society.
La falta de acceso a atención médica es la segunda preocupación más importante para los neoyorquinos en su lucha por lograr vidas mejores, según los encuestados, donde el 27% la ubicó como su gran barrera para progresar, seguida por la falta de acceso a universidades más asequibles, con 23%.
De igual manera, el sondeo enseñó que el 20% de las madres neoyorquinas expresaron un mayor acceso a servicios de cuidado infantil asequibles como principal prioridad para el avance económico, el 22% la necesidad de acceso a la capacitación laboral, y en particular, el 20% de los latinos enfatizaron la importancia de inversión pública en infraestructura para crear puestos de trabajo y aumentar el acceso a la formación laboral como medidas cruciales para salir adelante. Un 9% de los encuestados, de todos los ingresos, razas y etnias, eligió el cuidado infantil asequible como máxima prioridad para salir adelante económicamente.
Jennifer Hinojosa, analista de políticas de Community Service Society, y líder del proyecto, resaltó que los hallazgos de la tercera encuesta Unheard de 2023 indican que las viviendas asequibles en la ciudad de Nueva York dificultan el progreso económico de todos los neoyorquinos, y es especialmente más difícil para la comunidad hispana, en momentos en que el alcalde Eric Adams pretende echarle tijera a los recursos de agencias vitales, culpando la crisis de nuevos migrantes.
“Los latinos en la ciudad de Nueva York expresaron un fuerte deseo de un mayor acceso a la capacitación laboral y una educación universitaria más asequible. Desafortunadamente, los recortes presupuestarios del Alcalde exacerbarán los obstáculos que enfrenta la comunidad latina para navegar el clima económico actual”, dijo la analista. “Los latinos representan una parte importante de la fuerza laboral actual y futura en la ciudad de Nueva York y el sueño americano para muchas comunidades latinas en la ciudad de Nueva York se está volviendo inasequible e inalcanzable hoy en día“.
Hinojosa agregó que espera que el gobierno local utilice los hallazgos del sondeo para abogar por el bienestar de los neoyorquinos, particularmente aquellos con bajos ingresos y reconsidere la reducción en el presupuesto en servicios esenciales como educación pública, programas bibliotecarios, provisiones de atención médica, servicios sociales y para desamparados, apoyo a las comunidades de inmigrantes, financiamiento para estudiantes de CUNY y otros recursos vitales.
“Estos recortes afectarán directamente a todos los hogares de trabajadores de bajos ingresos y a las comunidades de inmigrantes dentro de la ciudad, en particular a aquellos que ya están lidiando con el desafío de cubrir necesidades básicas como alimentos, atención médica, vivienda y más”, acotó la investigadora.
El reporte no solo puso los datos sobre la mesa como una manera de arrojar luces sobre el sentir de los neoyorquinos, sino que además hizo un llamado a la Ciudad y al Estado para que aborden las problemáticas planeadas para fomentar el progreso económico. Para ello dentro de sus recomendaciones urgió a la Administración Municipal y a Albany a priorizar la disponibilidad de “viviendas verdaderamente asequibles”, ampliar el acceso a atención médica y educación y universidad asequibles, implementar iniciativas que promuevan el desarrollo y la colocación de la fuerza laboral, particularmente entre los neoyorquinos de bajos ingresos, invertir en infraestructura para crear empleo y aumentar el acceso a formación laboral.
Asimismo, instaron a Albany a que apruebe protecciones cruciales para los inquilinos para evitar ser desalojados y frenar los aumentos vertiginosos de los alquileres, con leyes como “Buena causa”, ampliar el derecho a abogados contra el desalojo, al igual que el programa de Vales de Acceso a la Vivienda y la creación de viviendas sociales fuera del mercado especulativo.
Por otro lado, recomendaron ampliar las estrategias de extensión e inscripción financiando programas de asistencia para adquirir cobertura o programas de seguro de salud, ampliar los programas estatales para inmigrantes de bajos ingresos para obtener #Coverage4All, aprobar el New Deal para CUNY que eliminaría las tasas de matrícula, haciendo que la universidad pública sea más asequible para los estudiantes de ingresos bajos y moderados, ampliando la elegibilidad para el Programa de Asistencia de Matrícula (TAP) del estado de Nueva York, construir caminos hacia aprendizajes, pasantías, becas y otros programas no tradicionales.
Sobre las mejoras acerca del cuidado de niños, el informe recomienda mejorar el Crédito Infantil Empire State (ESCC) para beneficiar a todas las familias neoyorquinas de ingresos más bajos y hacer que el crédito sea totalmente reembolsable, aumentar el acceso a vales de cuidado infantil, implementar un límite al copago familiar para aumentar la asequibilidad para las familias y ampliar el acceso al cuidado infantil para familias inmigrantes, independientemente del estatus migratorio y para padres que trabajan en horarios no tradicionales. También integrar centros de cuidado infantil en sitios del vecindario, como centros comunitarios de vivienda pública, casas de asentamiento y colegios comunitarios.
“La combinación de costos crecientes de alimentos, vivienda, primas de seguro médico, tarifas de metro y autobús, y el cuidado infantil hacen que el costo de vida en la ciudad de Nueva York sea astronómico, especialmente para las familias de bajos ingresos, y está claro que la movilidad económica es más difícil para las personas de raza negra y de bajos ingresos, latinos y madres trabajadoras”, insistió la encuesta, recalcando que los neoyorquinos están cada vez más al borde del abismo financiero.
“Estos obstáculos son aún más pronunciados en ciertas áreas geográficas, particularmente en el Bronx y Brooklyn. Esperamos que estos informes subrayen la importancia de realizar inversiones públicas en áreas cruciales como vivienda, educación, cuidado infantil y tránsito, y brindar a todos los neoyorquinos una oportunidad de salir adelante y vivir a su máximo potencial”, concluyeron, augurando fuertes vientos tras los recortes que el Alcalde plantea responsabilizando a la afluencia de nuevos migrantes, si los neoyorquinos no hacen oír su voz.
Y también trayendo a colación la canción “New York New York”, de Frank Sinatra, los autores del reporte de Community Service Society señalaron que aunque el legendario intérprete coreaba que ‘el que lo logra en Nueva York, puede lograrlo en cualquier lugar’, y que al final, ‘depende de uno’, en todos los rincones de la Gran Manzana, este 2023, “lograrlo: cubrir el altísimo alquiler, pagar la atención médica de rutina, el transporte, los alimentos y, si es necesario, y uno se atreve (formar una familia y pagar el cuidado de los niños) se siente como un desafío económico hercúleo“. ‘New York, New york, New York’.
Datos del sondeo y la lucha contra el costo de vida en NYC
- 45% de los encuestados ven la vivienda asequible como la prioridad número 1 que se vuelve freno para poder salir adelante
- 27% de los encuestados ven como prioridad principal el acceso a la atención médica
- 20% de las madres expresaron un mayor acceso a servicios de cuidado infantil asequibles como principal prioridad para el avance económico
- 22% se manifestaron hacia el acceso a la capacitación laboral y hacer que la educación universitaria sea más asequible para salir adelante
- 20% de los latinos enfatizaron la importancia de la inversión pública en infraestructura para crear puestos de trabajo y aumentar el acceso a la formación laboral para salir adelante.
- 9% de los encuestados de todos los ingresos, razas y etnias eligió el cuidado infantil asequible como máxima prioridad para salir adelante económicamente
- 50% de los hogares en Nueva York no pueden suplir sus necesidades sin ayuda del gobierno, familiares o comunidad
- 65% de los hogares en El Bronx están en esa situación
- 80% de las madres solteras con hijos en NY ganan menos que el costo de vida
- 31% de ellas están por debajo del nivel de pobreza
- 52% de los hogares casados con niños no ganan suficientes para cubrir el costo de vida
- 44% de los hogares sin niños enfrentan ese desafío
- 612,208 hogares latinos batallan para llegar a fin de mes y cubrir sus gastos
- 21% de los hogares latinos están por debajo del nivel de pobreza, 148,000 familias
- 65% de los latinos no tienen suficiente dinero para asumir el costo de vida
- 58% es el caso entre hogares negros y 32% entre familias blancas
- 131% han aumentado los costos desde el 2000 en NYC
- 71% han aumentado los ingresos desde el 2000 en NYC
Fuente: El Diario