El patinaje artístico, tabla de salvación para jóvenes marginadas en Nueva York
Jóvenes afroestadounidenses y mestizas, vestidas con sus trajes de brillo, se deslizan sobre el hielo de las pistas de Central Park en Nueva York al ritmo de un popurrí musical de las películas “Barbie” y “Wonder Woman”, con la gracia de patinadoras casi profesionales.
La asociación Figure Skating in Harlem (FSH), un centro educativo y de entrenamiento, celebró en febrero su festival anual de invierno, ante un público entusiasta en pleno pulmón verde de Manhattan, rodeado de rascacielos.
Desde los años 1990, esta organización sin ánimo de lucro, única en Estados Unidos y en el mundo según su fundadora y presidenta, Sharon Cohen, “ayuda a las jóvenes a transformar sus vidas, a crecer con confianza, maestría y éxito educativo” en Harlem.
En este barrio multicultural y popular del norte de Manhattan, “Patinaje artístico en Harlem es toda mi vida. No recuerdo ningún momento de mi vida en el que no haya patinado”, explica sonriente a la AFP Nadia Neil, de 17 años, alumna de una escuela nocturna que patina en la FSH desde los seis años.
“Como una mariposa”
“Empecé aprendiendo poco a poco, evolucionando y creciendo. Como una mariposa que sale de su larva. Me enamoré de este deporte“, cuenta su compañera de la misma edad, Ashley Prentice.
“Cuando patino, me siento poderosa y libre”, dice esta adolescente afroamericana de Harlem, que ha encontrado una “familia” y una “comunidad” en esta atípica combinación de profesores y deportistas que es la FSH.
La idea surgió en 1991 entre familias afroamericanas de Harlem y Cohen, una mujer blanca de unos sesenta años y antigua patinadora profesional, que fundó la asociación en 1997.
“Fue realmente la comunidad (de Harlem) la que puso en marcha este programa y decidió que, además del patinaje artístico -que no es un deporte que practiquen muchas niñas de color-, la educación estaría realmente en el centro del programa, porque es lo que puede abrirles puertas en su futuro”, afirma.
“Así que eso se convirtió en la piedra angular (de la FSH): la educación en el centro, el patinaje como punto de entrada, y lleva así muchos años”, se entusiasma Cohen.
Según la FSH, la mayoría de las 300 alumnas que patinan cada año tienen entre 6 y 30 años y viven en Harlem y el Bronx, “dos de los barrios más desfavorecidos de Nueva York”, un increíble mosaico multicultural de 8,5 millones de almas con profundas desigualdades socioeconómicas.
Familias negras desfavorecidas
“Casi todas las niñas y jóvenes (98 %) se identifican como afroamericanas/negras, hispanas o mestizas, y alrededor del 91% proceden de hogares con ingresos entre extremadamente bajos y moderados”, afirma la asociación.
Nadia cree que “las jóvenes de Harlem a veces no reciben el apoyo que necesitan o se las pone en el camino equivocado”.
Por eso, la joven está encantada con las clases nocturnas impartidas por profesores profesionales -además de la escuela pública durante el día-, ya sea de ciencias o de ciencias sociales, educación cívica y ética o, por supuesto, de deporte.
FSH también enseña a gestionar las finanzas y, en general, “a ser una buena persona”, dice.
Para Sharon Cohen, el patinaje artístico es un deporte “único” que “realmente se aplica a la vida”.
“Empiezas fallando, te metes en el hielo y te caes”, sonríe la ex deportista.
“Así que se trata de aprender qué haces una vez que te has caído, cómo te vuelves a levantar y cómo empiezas de nuevo. Y que no hay nada malo en fracasar”.
Según las cifras de la FSH, el 88% de sus alumnos obtienen las mejores notas en la escuela hasta el final de la enseñanza secundaria y su eventual inscripción en la enseñanza superior.
Y los índices de satisfacción de las niñas, las jóvenes y sus padres sobre la calidad de la escucha, el intercambio, el hecho de sentirse “valoradas” en las clases o sobre el hielo, de ser “empujadas a alcanzar sus objetivos” y de tener una “hija segura de sí misma y orgullosa” oscilan entre el 90 % y el 97 %.
Poco conocida, los logros de la FSH ha seducido una gran plataforma que ha realizado una serie documental que se difundirá en 2025.
Fuente: AFP