Creciente y peligroso consumo de alcohol en Nueva York: uno de cada seis adultos admite haberse sentido borracho
Se acerca la época más festiva del año para las comunidades hispanas de Nueva York, en donde además del abrazo en familia y los platillos especiales de Navidad hay un “compañero” peligroso cuya presencia se exacerba aún más: el alcohol.
Bajo una tendencia creciente después de la pandemia, según los datos del Sistema de Vigilancia de Factores de Riesgo Conductuales (BRFSS) de Nueva York, millones de residentes de la Gran Manzana siguen informando sobre el consumo excesivo de alcohol.
En todo el país, las muertes y las patologías causadas por este hábito continúan rompiendo récord nunca antes vistos.
En paralelo, de acuerdo con portavoces del Departamento de Salud e Higiene Mental de la Ciudad de Nueva York (DOHMH), se debe remarcar en estas fechas de alta incidencia de consumo etílico, que están disponibles en la Gran Manzana, incontables recursos gratuitos para ayudar a controlar una de las adicciones socialmente más permitidas.
En cualquiera de los balances recientes, uno de cada 6 adultos en el estado de Nueva York (16.7%) informó haberse sentido borracho.
Las “borracheras” fueron el patrón más común que define el consumo excesivo de alcohol, entre los neoyorquinos.
Borrachera tras borrachera
Los adultos que informaron problemas con las copas, informaron un promedio de 4,7 ocasiones de borracheras por mes (mediana = 1,9 bebidas) y un promedio de 7,1 bebidas por episodio de borrachera (mediana = 5,3 bebidas).
Según los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC), beber en exceso es consumir 4 o más bebidas para las mujeres y 5 o más bebidas para los hombres en una sola ocasión.
En términos semanales, beber demasiado es consumir 8 o más bebidas a la semana para las mujeres y 15 o más bebidas a la semana para los hombres.
En Manhattan, aproximadamente el 20,8 % de los adultos informaron haber bebido en exceso, casi el doble de la tasa en Staten Island, donde solo el 10,8 % de los residentes adultos informaron el mismo comportamiento.
La tasa de consumo excesivo de alcohol en Manhattan es la más alta de todos los condados, ya que El Bronx, Queens y Brooklyn cuentan con tasas del 11.7 %, 13.3 % y 16.7 %, respectivamente.
“Lo dejé demasiado tarde”
Fue justamente en una Navidad de hace 10 años, cuando Xavier Valdivia, un panameño residente de El Bronx, asegura que “destruyó su vida por embriagarse hasta perder la razón”.
“Tomé tanto en una celebración navideña, que perdí totalmente el sentido. Terminé tocando inapropiadamente a mi hijastra. Ese año perdí todo. Mi familia, mi trabajo y mi salud mental”, reconoce el centroamericano.
Xavier buscó ayuda en la Oficina Central Hispana de Alcohólicos Anónimos de Nueva York, se rehabilitó y hoy asegura que puede disfrutar la vida y todas las fiestas “sin tomar una gota”, pero reconoce que fue demasiado tarde.
“Para nosotros los hispanos una fiesta es inconcebible, sin los ‘sixpack’ de cerveza o la botellita de cualquier licor. El país está tan centrado en el fentanilo y en otras drogas duras, que la epidemia del alcoholismo la olvidamos. Y allí vemos a niños y niñas, ya metiéndose borracheras, como algo normal”, compartió.
“Traguitos demás”
Un análisis realizado por Thinh Vu, candidata al doctorado de la Universidad de la Ciudad de Nueva York (CUNY), explica cómo surgió la exacerbación del abuso de alcohol en la Gran Manzana, debido a la pandemia de COVID-19, especialmente entre las poblaciones minoritarias hispanas, que además enfrentan desafíos de salud desproporcionados y desigualdades sociales.
“La ciudad ha sido testigo de un aumento preocupante en el consumo excesivo de licores, impulsado por factores como el aislamiento social, la angustia psicológica y una mayor disponibilidad de estos productos”, destaca la académica en una investigación divulgada en el último trimestre de 2024.
Los datos ponderados de la última década de la Coalición Comunitaria Anti-Drogas de América (CADCA), la dependencia del alcohol en Nueva York es más alta entre los blancos (21%), seguidos de los latinos (14,8%) y los afroamericanos (11%). Pero hay una advertencia: a pesar de los niveles más bajos de consumo excesivo de alcohol, los neoyorquinos afroamericanos y latinos tienen más probabilidades que los neoyorquinos blancos de ser hospitalizados o morir, como resultado del consumo excesivo de alcohol.
Los “traguitos demás” en Nueva York, con base a las encuestas de 2023, fueron más comunes en los hombres, especialmente en los menores de 35 años, y en los adultos que tenían un ingreso familiar anual de $75,000, según el estudio de BRFSS.
Los adultos blancos no hispanos también informaron tasas más altas de consumo etílico que otros grupos raciales y étnicos, con un 17.3% que informó beber en exceso y un 9% que bebía en exceso.
NYC: tragos en exceso
Específicamente en la Gran Manzana, de acuerdo con las advertencias de las autoridades de salud de la Ciudad de Nueva York, “casi la mitad de los neoyorquinos que beben alcohol informan haber bebido en exceso (consumo a largo plazo) o haber experimentado borracheras (consumo de gran volumen de alcohol a corto plazo).
“Ambos tipos de consumo de alcohol pueden aumentar el riesgo de sufrir problemas de salud graves, lesiones o accidentes y de cometer o experimentar actos de violencia”.
Un nuevo estudio, publicado en The American Journal of Medicine, el cual se basó en datos de los CDC, arrojó que las muertes relacionadas con el alcohol incluyeron aquellas causadas por ciertas formas de enfermedad cardíaca, enfermedad hepática, daño nervioso, daño muscular, pancreatitis e intoxicación por alcohol, así como trastornos mentales y conductuales relacionados.
El estudio no incluyó otras muertes influenciadas por el alcohol, como los accidentes.
Busque ayuda en NYC:
- Para obtener más información y encontrar servicios relacionados con el consumo de alcohol en la Gran Manzana, visite: • nyc.gov/alcoholanddrugs • oasas.ny.gov/recovery-starts-here • rethinkingdrinking.niaaa.nih.gov • cdc.gov/alcohol
- Comuníquese con el 988 para obtener asesoramiento gratuito y confidencial en caso de crisis, apoyo en salud mental y consumo de sustancias, y derivaciones a otros servicios de atención.
- Llame o envíe un mensaje de texto al 988 o chatee en nyc.gov/988. Los servicios de texto y chat están disponibles en inglés y español, y los consejeros están disponibles por teléfono las 24 horas, los 7 días de la semana en más de 200 idiomas.
Fuente: El Diario