Madres buscadoras hallan 35 fosas en el estado mexicano de Sonora

Integrantes del colectivo Buscadoras por la Paz informaron este jueves el hallazgo de 35 fosas clandestinas donde se estima hay más de 50 víctimas de desaparición, en un cementerio clandestino del crimen organizado junto a un camino vecinal rumbo a la costa de Hermosillo, capital del estado de Sonora, en el noroeste de México.

Cecilia Delgado Grijalva, fundadora de Buscadoras por la Paz, quien ya encontró los restos de su hijo Jesús Ramón, pero ahora está buscando a un sobrino desaparecido, Moisés Alfonso Reynoso, explicó que el colectivo recibió varios mensajes anónimos que las orientaban hacia un cementerio clandestino.

“Fue por una llamada anónima (que) ya nos habían indicado de este lugar, pero nos decían que era más adelante e hicimos hallazgos más adelante. Nos dijeron que era un panteón clandestino, y vaya que sí es, porque hasta ahora llevamos 35 fosas y sabemos que van a salir muchísimas más”, reveló Delgado.

Las 35 fosas fueron encontradas por las activistas en la Carretera 26 que conecta a Hermosillo con Bahía de Kino, en el lecho de un arroyo a la altura del kilómetro 20.

“Está el lugar blandito para que puedan hacer sus fosas, y aquí nadie los ve y si los ven nadie les dice nada”, agregó Delgado.

A las búsquedas también se sumaron las integrantes del colectivo Guerreras Buscadoras de Guaymas y Empalme, como una muestra de sororidad.

Hace un año, en enero de 2024, hubo otro hallazgo muy cerca de este cementerio clandestino, en las fosas de El Choyudo, donde localizaron 53 cuerpos y todas las víctimas eran originarias del valle de Guaymas.

“A los criminales, les pedimos que nos dejen los cuerpos expuestos”, suplicó Synthia Maritza Gutiérrez, quien busca a su hijo Gustavo Ángel Godínez, desaparecido el 30 de junio del 2017 en Guaymas.

“Es lo que le pedimos a esa gente. Sepan que como madres es muy doloroso y les llamamos para que nos los dejen expuestos. Ya si con su vida pagaron, que nos los dejen para poderlos regresar a casa”, agregó la madre buscadora.

Desde el martes 28 de enero que ocurrió el hallazgo, la zona ha sido inspeccionada por peritos del Laboratorio de Inteligencia Científica Forense de la Fiscalía de Justicia, personal de la Comisión Estatal de Búsqueda de Personas Desaparecidas.

Así como por agentes de Guardia Nacional, Agencia Ministerial de Investigación Criminal, junto a decenas de mujeres que integran los colectivos, quienes apoyan a las autoridades para sacar e identificar los cuerpos.

El fiscal General de Justicia en Sonora, Gustavo Rómulo Salas Chávez, confirmó el hallazgo e informó que procesar la escena del crimen para sacar los restos humanos llevará varias semanas, y que será con pruebas de comparativa genética, cómo se determinará la identidad y el número de víctimas.

Fuente: EFE